CEREMONIA DEL MEMORIAL DE LA PAZ (HIROSHIMA)

Fui elegida para asistir a la ceremonia del memorial de La Paz en Hiroshima y esa fue una de las mejores noticias que pudieron darme durante este viaje. Estuvimos personas de distintos países del mundo, recordando el horror de la bomba atómica, que atormentó esta ciudad el 6 de agosto de 1945, la tristeza y desgracias que hubieron, fomentando así un deseo de paz en todo el mundo.

Es increíble ver a los jóvenes de distintos países reunidos para un fin común, en este caso el de promover la paz y abolir el uso de armas atómicas. Convirtiendo a este mundo en uno mejor; hablando, jugando, conociéndose, cantando y aprendiendo diferentes costumbres.

Después de la ceremonia me he puesto ha pensar ¿por qué existen las guerras, la discriminación, la violencia?, ¿para qué hacerlo?, y ¿por qué hacerlo? Si después de ver y haber estado con personas que se reúnen y conversan como si nada, sin distinción de raza o género o religión, ¿Por qué querer ser una mala persona? ¿Por qué ha de haber distinción? ¿Para qué una guerra? ¿Para qué el poder?

Es así como tuve la oportunidad de convivir con las personas que vivieron esta experiencia tan desagradable. No me queda más que traerme como aprendizaje que a pesar de todo lo que ellos vivieron son personas inteligentes, personas que se desenvuelven, personas que luchan por salir adelante, personas exitosas y personas que son capaces de dar y compartir, como en la interpretación de danza que nos hicieron antes de volver llamada “kagura”, en la que se expresa una historia sin diálogos donde solo se oye la música y ellos bailan. También su habilidad para muchas cosas que hacen y su amable hospitalidad me han enseñado mucho.

El mundo necesita cambiar, y quizá crees que no puedes hacer nada para cambiar eso. Pero quizá si cada uno de nosotros intentará cambiar algo en si mismos, por la mínima cosa que sea y comenzáramos ha vivir de una manera un poco distinta, generaríamos un gran cambio, más grande quizá del que pensamos.

Teniendo esto en mente y como un enorme grupo de scouts que somos, alrededor del mundo, debemos tener en claro que es lo que queremos hacer para que el mundo cambie y como lo haremos. Comenzando con uno mismo, generando un cambio en nosotros mismos, aplicando quizá las nuevas costumbres aprendidas, para después invitar a los demás a seguirnos, continuando así con nuestro espíritu scout sin importar el lugar en donde estemos y con quienes nos encontremos, sin dejar de lado nuestro objetivo: La paz en todo el mundo.

Nosotros como hermanos scouts que somos, que tenemos la fortuna de poder hacer un mundo mejor, compartiendo como hermanos, conviviendo como seres pensantes y sonriendo con el corazón y que pese a las malas experiencias siempre hay algo porque pensar y luchar todos los días, podemos generar un cambio.

"El cambio comienza conmigo, el cambio comienza contigo"

By Diana Paola Rodriguez Perez from Mexico.